Publicado por Rodrigo Osegueda.
Soñante: José, esposo de María.
Fuente: Evangelio de Mateo, versículos 18-24; Bivlia versión Reina-Valera.
Contexto: María a concebido un hijo de forma sobrenatural por la potencia creadora del espíritu santo. Debido a las leyes de la torah y con la imposibilidad de argumentar el origen carnal de su hijo, María se enfretaría a la pena de muerte por lapidación. José, con quien se encontraba comprometido decide no delatarla pero recibe un sueño revelador.
El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.
José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.
Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.
Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.
Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo:
He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo,
Y llamarás su nombre Emanuel,
que traducido es: Dios con nosotros.
Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer.
Comentario: Claramente es un sueño profético que no sólo hace referencia a una situación formal, sino también a la universalidad simbólica que hasta entonces el pueblo judío tenía establecido.
Imagen: Ícono ortodoxo de San José.